Proyectamos unas Topografías Híbridas, a medio camino entre lo natural y lo artificial, que generen unos taludes integrados de protección frente al viento, frente al ruido de la carretera autonómica y frente a la sensación de inseguridad que puede generar estar próximos a un vial de tráfico intenso. Para generar esas topografías, planteamos a modo de conchas invertidas hincadas en el terreno, 3 espacios que han de responder a los 3 usos fundamentales (cultural, infantil y deportivo). Estas formas irregulares se delimitan mediante dos anillos perimetrales que intersectan creando un perímetro verde de topografía sinuosa que genera unos taludes irregulares, y un vacío central que albergará un determinado uso. Entre estas conchas anilladas discurren los itinerarios y recorridos que además albergarán el mercado. Estos recorridos llevan aparejados una estructura-celosía de cuerdas marineras, que permiten generar situaciones cambiantes y modificables en función de su densidad aportando dinamismo a la propuesta.